Con el fin de atender una demanda turística cada vez más exigente y mejor informada y atender las necesidades de mejoramiento de la calidad de la oferta turística bajo un enfoque de turismo sostenible, en Colombia se ha detectado la necesidad de promover instrumentos que fomenten el uso de prácticas que permitan lograr el equilibrio entre el uso eficaz de las potencialidades estéticas, recreativas, científicas, culturales y naturales y la garantía de que se puedan proporcionar iguales o superiores beneficios a las generaciones futuras.

Dentro de éstos ítems importantes se encuentra la sostenibilidad energética. El uso de la energía puede representar un gran impacto, especialmente teniendo en cuenta las fuentes usadas para proveerla, es por ello que se deben implementar estrategias que reduzcan el consumo y ayuden de forma paulatina a cumplir las metas de sostenibilidad energética.

Por ello le presentamos algunas estrategias que se pueden implementar para reducir el consumo:

1. Establezca acciones de información y sensibilización de huéspedes y personal sobre el uso eficiente de equipos eléctricos y electrónicos, además exponga instrucciones de uso invitando a cerrar ventanas y puertas mientras se encuentre en uso, programar el apagado del TV durante la noche y cuando se deje la habitación, desconectar cargadores de celulares o baterías, usar el aire acondicionado a temperaturas moderadas, entre 21 y 25ºC, entre otras.
2. Establezca acciones para sustituir la iluminación por tecnologías más eficientes. La iluminación LED consume del 80 al 90% menos electricidad que una bombilla incandescente y el 65% menos que una fluorescente.
3. Indique a los empleados sobre mantener apagados los monitores de computadoras o usar la función de suspendido si van a tener recesos extensos. Igualmente informe en las salas multimedia con acceso a huéspedes.
4. Establezca un plan de iluminación nocturna en el cual identifique las zonas mínimas donde se hace necesario dejar las luces encendidas y se realicen rondas o se automaticen los procesos para apagar equipos no utilizados. En el mercado existen soluciones de bajo costo y altos valores agregados con los cuales puede gestionar su control.
5. El aire acondicionado representa entre un 45% y un 60% del consumo de energía en el hotel. Establezca políticas de uso del aire acondicionado y haga partícipes a los usuarios en éstas estrategias. Por cada grado que usted o sus usuarios aumenten la temperatura en el aire, podrá ahorrar hasta un 8% de la energía que éste consume. Además, establezca una rutina periódica de los mantenimientos y reparaciones necesarias, pues cuando el aire se comienza a llenar de polvo, aumenta el tiempo de uso y por tanto su consumo. Existen tecnologías en el mercado con el cual usted puede hacer pequeños cambios en la temperatura de todos los aires de forma que ahorre energía y que no afecte el comfort de los usuarios.
6. Instale diferentes tecnologías que le permitan gestionar los aparatos en las habitaciones, hacer un corte de la energía cuando no se encuentre habitado o apagarlo de forma remota. Algunas de éstas tecnologías pueden ser: sensores de movimiento, tarjeteros y controladores inteligentes.
7. Instale diferentes fuentes de energía limpias que le permitan reducir su huella de carbono, además del precio de su factura de energía como la solar o eólica. Los hoteles normalmente tienen grandes terrazas con espacios disponibles para la instalación de éstas tecnologías que están teniendo un gran auge en la actualidad, a veces sin requerir inversión inicial de su parte, sino como un modelo ESCO.
8. Mida y lleve un registro de sus consumos. Lo que no se mide no se puede mejorar. No podrá definir unas metas específicas si define un efectivo  de cumplimiento y no tiene una forma de saber si llegó a la meta. Para determinar de dónde provienen los problemas de consumo y aplicar los correctivos, hágalo en cada una de las áreas operativas del establecimiento.

Finalmente, no olvide que aunque éstas políticas requieren de una inversión inicial, sus beneficios no solo le permitirán cumplir con las normas actuales de sostenibilidad energética, sino que en un mediano plazo le ahorrarán dinero, aumentarán la vida útil de sus aparatos e infraestructura y hasta podrá obtener exenciones en su carga impositiva.